un oasis
olvidado
La Prensa,
02.04.2021
“Si quieres saber
cómo te fue en la guerra, pregúntale a tu enemigo”
Sun Tzu.
“Si los argentinos
soplan sobre nosotros, nos derrumbamos”
Almirante
Woodward, Comandante de la flota británica.
Un nuevo 2 de
abril se hace presente, a 39 años del histórico desembarco de las fuerzas
anfibias argentinas en las Islas Malvinas, para honrar a los veteranos de
guerra y caídos en la Guerra del Atlántico Sur. Pocas veces en la historia se
vio a tantos argentinos compartir patriotismo, dejando de lado sus rivalidades
políticas o culturales: La recuperación de la Soberanía Argentina sobre la
Perla Austral, tras casi 150 años de usurpación británica, fue motivo
suficiente.
Al llegar esta
época irrumpe nuevamente la rivalidad y nos lleva a olvidar el propósito de la
fecha. Entonces las heroicas anécdotas, las historias cargadas de valor, los
cuentos inundados de patriotismo y el coraje de los grandes soldados (tomando
la acepción más amplia del término, sin distinción de Fuerza Militar o de
Seguridad, de arma, de rango, de especialidad, ni nada) quedan tapados por la
discusión sobre la situación política del país en ese momento, desaciertos de
altos mandos militares o cualquier otro punto de disidencia. Es ahí cuando, una
vez más, como sociedad quedamos anclados a un enfrentamiento corrosivo sin ser
capaces de valorar al argentino que se jugó hasta el pellejo en una situación
límite por una causa de interés nacional.
Aquel viernes 2 de
abril del 82 el contralmirante de infantería de Marina Carlos Büsser comandó
exitosamente la “Operación Rosario”. Las tropas argentinas desembarcaron, sin
derramar sangre enemiga desalojaron a las fuerzas militares y a las autoridades
británicas, izaron el pabellón albiceleste y quedaron a cargo del territorio
malvinense.
Ambos países se
trenzaron en un enfrentamiento naval, terrestre y aéreo que duró 74 días, dejó
un saldo de 649 argentinos caídos en combate y terminó con la rendición
argentina el 14 de junio. El milenario general chino Sun Tzu decía: “Si quieres
saber cómo te fue en la guerra, pregúntale a tu enemigo”. Esta frase debería
ser nombrada cada vez que se habla de Malvinas; en Argentina, o por costumbre o
por desconocimiento, nunca se valoriza la gran actuación de nuestros
compatriotas en el territorio austral. Si en cambio consultamos al enemigo
inglés o a los medios internacionales, resulta ser que los "argies",
como nos llamaban de manera peyorativa, estuvieron a días de doblegar
militarmente al imperio británico que contaba con el apoyo de la OTAN y hoy,
por su desempeño, son admirados y estudiados en todo el mundo, menos en su
país.
Si en las escuelas
se enseñara lo sucedido en Malvinas no haría falta ningún Hollywood para crear
referentes heroicos ni gestas impresionantes. Los tenemos entre nosotros,
habiendo sido protagonistas de una hazaña contemporánea, hace solamente 39
años. No hay fantasía que supere el relato del periodista inglés Garreth Parry
en el cual la tripulación de una fragata británica, mientras estaba siendo
bombardeada por pilotos argentinos y veía su buque destruirse, estalló en
aplausos alabando la destreza de los atacantes que aparecían en maniobras a
metros del mar porque la escena que estaban viviendo era imposible. Sí, ¡el
enemigo aplaudía la habilidad del bombardero que los volcaba al océano!
Dos torpedos
habían alcanzado al crucero ARA General Belgrano, la nave yacía tumbada sobre
la superficie marítima y el comandante capitán Héctor Bonzo todavía estaba en
ella. Una voz lo sorprendió por atrás: -¡Si no salta, yo tampoco salto! ¡Me
quedo con usted, capitán!. Era el suboficial Barrionuevo. -¿¡Cómo no se arrojó
todavía a las balsas!? ¿¡Qué hace usted aquí si ya no queda nadie!? increpó el
superior… luego de una última recorrida buscando camaradas, inflaron los
chalecos salvavidas y se tiraron al agua. Tres balsas esperaban a las dos
figuras humanas a unos escasos 50 metros, sin saber quiénes eran, a riesgo de
que el mar los chupara detrás del Belgrano.
Habían ordenado el
repliegue de la unidad que estaba en el Monte Dos Hermanas porque los ingleses
estaban avanzando. -¡Vamos Poltro, te van a matar! repitió el sargento
Etcheverría al ametrallador Poltronieri que no osaba moverse. -Yo me quedo, les
cubro la retirada. -No vas a poder solo, me quedo con vos! -¡Ustedes tienen
familia, yo los cubro! ¡Váyanse todos carajo! Entonces el soldado, solo con su
MAG, alternaba entre disparos y retroceso. Cuando los ingleses entraron a
Puerto Argentino preguntaron qué unidad había estado en ese lugar impidiendo el
avance porque los habían demorado 8 horas para avanzar. Había sido el trabajo
de un solo hombre, cubriendo a sus pares.
Argentina, como
sociedad y país, está obligada a encontrarse en principios compartidos para
poder cimentar algún futuro. Todo lo vivido durante aquellos 74 días en
Malvinas debe verse como un oasis de valores humanos y no como otro motivo de
división. Nuestros soldados cumplieron con su deber, ahora los ciudadanos
cumplamos en inmortalizar los valores, el patriotismo y el coraje que, una vez
en los territorios más australes de nuestra extensión, algunos tuvieron.
¡Fueron hombres, volvieron inmortales!
Desde el CES
Centro de Estudios Salta, rendimos homenaje a todos los veteranos y caídos en
nuestras Islas Malvinas. Especialmente a los salteños que desde el norte
salieron y quedaron de custodios eternos de aquel suelo malvinense:
Capitán de Fragata
ARA Sergio Gómez Roca
Capitán FAA
Marcelo Pedro Lotufo
Sargento Ayudante
EA Humberto Blas
Soldado FAA. Luis
Guillermo Sevilla
Cabo Principal ARA
Mario Rolando Alancay
Cabo Principal ARA
Ricardo Gabriel Gallardo. Crucero General Belgrano
Cabo Primero ARA
Bernardino Isidro Campos. Crucero General Belgrano
Cabo Primero de
Mar ARA Patricio Alfredo Guanca. Islas Georgias
Cabo 1ro ARA Jorge
Luis Sisterna. Monte Dos Hermanas
Cabo Segundo ARA
José Francisco Chaile. Crucero General Belgrano
Cabo Segundo ARA
Luis Rolando Flores. Crucero General Belgrano
Suboficial Segundo
ARA Juan Alberto Gómez. Crucero General Belgrano
Suboficial Segundo
ARA Ignacio Eloy González. Crucero General Belgrano
Soldado Conscripto
ARA Ramón Vicente Fabián. Crucero General Belgrano
Soldado FAA. Luis
Guillermo Sevilla
Soldado ARA Ramón
Gutiérrez Crucero General Belgrano
Soldado ARA Isaac
Claudio Jira. Crucero General Belgrano
Soldado ARA Víctor
Hugo Juárez. Crucero General Belgrano
Soldado ARA Marcos
Antonio Lamas. Crucero General Belgrano
Soldado ARA Omar
Alfredo Madrid. Crucero General Belgrano
Soldado ARA Carlos
Hugo Medina. Crucero General Belgrano
Soldado ARA Ricardo
Armando Paz. Crucero General Belgrano
Soldado ARA José
Luis Ramírez. Crucero General Belgrano
Soldado ARA
Eleuterio Hilario Ramos. Crucero General Belgrano
Soldado ARA José
Humberto Rodríguez. Crucero General Belgrano
Soldado ARA Jorge
Dennys Ruiz. Crucero General Belgrano
Soldado ARA
Ricardo Alberto Torres. Crucero General Belgrano
Soldado ARA Omar
Osvaldo Vargas. Crucero General Belgrano
Soldado ARA. Jorge
Luis Vélez. Crucero General Belgrano
Soldado ARA Martín
Rey Vetancour. Crucero General Belgrano
Soldado ARA Mario
Vilca Condorí. Crucero General Belgrano
Soldado ARA. José
Agustín Villegas. Crucero General Belgrano
Soldado ARA Mario
José Zabala. Crucero General Belgrano
Soldado ARA Ramón
Elías Zalazar. Crucero General Belgrano
Personal Civil de
la ARA. Antonio Máximo Cayo. Buque Islas de los Estados
David San Román
Secretario | CES Centro de Estudios Salta
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