VS. MAPUCHES
El Cohete a la
Luna, FEB 6, 2022
Rico revitalizó un
discurso nacionalista para disputar la idea de territorio
La reafirmación de
la soberanía en todo el territorio argentino bajo una sola bandera es la base
programática del llamado “a la paz y la unidad” que desde Río Negro realizaron
veteranos de la guerra por las Islas Malvinas y referentes religiosos al
iniciar los actos públicos por todo el país por los 40 años del conflicto
armado con el Reino Unido. Tras la figura de Aldo Rico, símbolo del movimiento
carapintada que regresó a la política pública por fuera de los partidos
políticos, los organizadores eligieron El Bolsón para confrontar, sin
nombrarlas, con las comunidades del pueblo mapuche-tehuelche que disputan el
control real del territorio ancestral.
Un espectro amplio
de agrupaciones de veteranos de guerra de distintos puntos del país se sumó
abiertamente al conflicto por la apropiación y explotación del territorio. A
fines del año pasado habría tomado forma este proceso de ampliación y
fortalecimiento del espectro de la coalición de derecha con inserción local.
Podría tender a crecer hacia el próximo 2 de abril, cuando se cumplan 40 años
del desembarco de las fuerzas argentinas en el archipiélago, de acuerdo a
nuestra revisión de los pronunciamientos de algunos de sus protagonistas en los
últimos tres años.
Rico, militar
indultado, ex funcionario de gobierno y empresario, parece la punta del iceberg
de esta nueva fracción en el conflicto con comunidades mapuche. Oficiales y
suboficiales retirados (muchos con residencia en la Patagonia) son la
conducción real de este movimiento que muestra una estrategia y un discurso
diferentes a los que despliegan los gobiernos locales, aunque complementarios y
probablemente consensuados. Con Rico como símbolo aglutinante y sorpresa para
la gran mayoría, el viernes 28 de enero la Federación de Veteranos de Guerra
acaparó el acto oficial y el desfile callejero por un nuevo aniversario de la
fundación de El Bolsón. Después realizó su propio acto de “defensa de la
soberanía nacional, la bandera argentina y el territorio” en la plaza Gesta de
Malvinas de Mallín Ahogado, paraje semi-rural ubicado a unos pocos kilómetros
del centro de la localidad rionegrina. El acto del intendente Bruno Pogliano
(Juntos por Río Negro) y el de los veteranos se refugiaron en un pluralismo
ecuménico para confrontar con la cosmovisión mapuche. La pluralidad elegida fue
religiosa, no política.
Monjes católicos
ultraconservadores, musulmanes de la mezquita más austral del mundo y un lonko
mapuche “amigo” aparecieron como los organizadores y base social propia de Rico
y los veteranos. En su discurso, el fundador del MODIN exaltó como muestra de
esa unidad nacional la presencia de tres sacerdotes del monasterio Nuestra
Señora de Guadalupe de El Bolsón, de los musulmanes de la mezquita liderada por
el Sheik Raúf Abdul Felpete y de Alejandro Huenchupán, lonko de la comunidad
Tekel Mapu. El mismo elenco había estado horas antes frente a Pogliano como sus
invitados, multiplicando oraciones y mensajes de paz al son de una banda
militar.
Secreto a voces
“Tenemos un
conflicto con los mapuches”, planteó Rico sin dar precisiones ante un público
afín que sabía de qué hablaba. Los veteranos Jorge Taranto y José Martiniano
Duarte habían anticipado que se eligió Mallín Ahogado para el primer acto
público por los 40 años a pedido de vecinos de la comarca andina “que sufren la
violencia”. “Hemos visto algunas quemas de banderas, que en algunos lugares
flamean otras banderas. Nosotros, sin discriminar a nadie, decimos que la
bandera que está allá arriba es la bandera argentina. Abajo tienen que ir todas
las demás”, sentenció Duarte.
El ex subteniente
Taranto es uno de los cientos de oficiales denunciados por torturas a los soldados.
Perteneció al Regimiento de Infantería 5 de Paso de los Libres, con posición en
Puerto Yapeyú durante la guerra. A una radio de Río Gallegos, le contó que la
coordinación de la actividad estuvo a cargo de Ramón López, presidente de la
Federación Nacional de Veteranos de Guerra de la República Argentina; Jorge
Altieri, soldado herido en combate; Ricardo Spadaro, jefe del Escuadrón Alacrán
durante la guerra; Eduardo Álvarez (Armada) y Juan Carlos Sosa (Ejército).
Más explícitos son
los veteranos en sus cuentas de redes sociales. Diego Frutos, administrador de
cabañas ajenas en Villa Mascardi, es una pieza de la confrontación con la Lof
Winkul Lafken Mapu por el derecho sobre tierras en el Parque Nacional Nahuel
Huapi, unos cien kilómetros al norte de El Bolsón. El año pasado recibió el
respaldo del grupo que integra Duarte y ahora estuvo en Mallín Ahogado y lo
trataron como héroe, como se lee en los epígrafes de las fotos que se sacó.
Al menos entre el
15 y el 21 de diciembre pasado dos veteranos recorrieron la comarca andina,
realizando visitas a Neuquén, Río Negro y Chubut en la preparatoria del
reciente acto. El encuentro en Esquel fue difundido. Por esos mismos días, se
discutía en juzgados locales la orden de desalojo de la lof Quemquemtreu del
paraje Cuesta del Ternero, donde en septiembre inició un proceso de
reivindicación territorial.
Remixado
“No vamos a hablar
de guerras (…) No es con la guerra que vamos a retornar a Malvinas, es con el
progreso”, dijo Rico en un discurso breve, con poco desarrollo de ideas,
reiterativo, moderado respecto a su pasado y a los otros veteranos en las
redes. “La patria no es un negocio, sino un desafío. No es un negocio”,
repitió.
Raúl Felpete nació
en Neuquén. Se convirtió al islamismo, cambió su nombre y se radicó más al sur
con su familia. A la mezquita se acercaron ex combatientes con los que
planificó la plazoleta Héroes de Malvinas en Mallín Ahogado. Con una sociedad
civil emprendió ese proyecto hace más de veinte años, que materializó con el
respaldo de la gestión Pogliano. A su turno, Felpete dijo que “hubo oposición
política a esta reunión”, sin brindar precisiones.
El protagonismo de
Felpete y su grupo protegió a los hombres sotana negra. El monasterio lo fundó
monseñor Andrés Morello, hermano del subteniente Emilio Pedro Morello, mano
derecha de Rico en el alzamiento carapintada y en los negocios. Perteneció a la
ultraconservadora Fraternidad Sacerdotal San Pío X de monseñor Marcel Lefebvre
desde 1978. Lefebvre fue expulsado de la Iglesia Católica en 1988 por
desconocer la liturgia resuelta por el Concilio Vaticano II aferrado a la misa
en latín y negar la autoridad del Papa. Con diferencias con el propio Lefebvre,
al año siguiente Morello se retiró para formar una congregación de “Padres
Católicos” con la que llegó a Mallín Ahogado. Algunos veteranos se alojaron en
las instalaciones ubicadas en el Rincón de Inalef, frente al cerro Perito
Moreno, en un predio de varias hectáreas con estrictas normas de seguridad.
Más allá del
proyecto personal de Rico (que no explicitó), su presencia con los veteranos en
El Bolsón dinamizó sectores sociales y económicos de la derecha local que en
general no se muestran públicamente, más cómodos en el lobby por los negocios,
a la sombra del poder de establecimiento Hidden Lake SAU o de las fuerzas
represivas. Rico revitalizó un discurso nacionalista para disputar la idea de
territorio; hace jugar el capital social acumulado por la condición de héroes y
combatientes en Malvinas para legitimar su intervención en un conflicto en el
que no es parte directamente involucrada. Estos actores tienen una base social
diferente a la empresarial del PPP (Propiedad Privada Patagonia) y Consenso
Bariloche, que sugieren otras prácticas y otras alianzas.
Crímenes
Este discurso de
unidad nacional nada dijo sobre el crimen de Elías Garay Cayicol, integrante de
Quemquemtreu, cometido el 21 de noviembre a pocos kilómetros de donde
desfilaron y desplegaron banderas celestes y blancas. El lunes 7 se realizará
una audiencia judicial para volver a analizar si se mantiene o se levanta la
prisión preventiva de Martín Cruz Feilberg y Diego Ravasio, imputados como
coautores de la tentativa de homicidio de Gonzalo Cabrera y del homicidio de
Garay. Los acusados están detenidos en Viedma y pretenden obtener la prisión
domiciliaria en Esquel o, al menos, ser trasladados a Bariloche.
A la vez, sigue
vigente y sin ejecutarse la orden de desalojo de esa comunidad de la tierra en
conflicto en Cuesta del Ternero.
Los movimientos de
unxs y la inacción de otrxs marcan el ritmo del verano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario