deja vulnerables a jueces
frente al narcotráfico
El
Gobierno se negó a financiar 890 dólares para la custodia de los jueces, pero
pudo pagar 6,2 millones de dólares al régimen comunista cubano para importar
médicos
Por Mamela Fiallo
Panam Post, Jun 23, 2020
El
asesinato de un juez y su esposa conmocionó a México pues
dejó al descubierto cómo la «austeridad republicana» del presidente socialista
Andrés Manuel López Obrador (AMLO) vulnera a los magistrados que se atreven a
perseguir a los carteles del narcotráfico.
Uriel Villegas, la víctima,
estaba a cargo de procesos penales contra los hijos de los líderes y fundadores
de los principales carteles en México: Ismael Zambada Imperial, “El Mayito
Gordo”, hijo del fundador del Cártel de Sinaloa; Rubén Oseguera González, “El
Menchito”, hijo del líder del Cártel Jalisco Nueva Generación y Nemesio Oseguera
Cervantes, del mismo cartel.
Como muchos otros, el juez
Villegas comunicó mediante un oficio del 21 de febrero de 2019 que dejaría de
tener escoltas, pues era un gasto que ahora él mismo debía cubrir y no su
empleador: el Estado. Hasta octubre del 2018 la Ley del Consejo de la
Judicatura otorgaba medidas de seguridad para jueces y magistrados a cargo de
casos de narcotráfico y delincuencia organizada.
Pese al acuerdo presentado
por Jorge Cruz Ramos, director de la Comisión de Vigilancia, a finales de 2018
(AMLO asumió en diciembre del 2018) para devolver los apoyos a los jueces, este
fue desechado por causa de la “austeridad republicana” que alega el Gobierno
actual.
Alrededor de 20 000 pesos
(890 dólares) cuesta financiar la custodia de un juez en un país con más de 100
homicidios por día y un promedio de un alcalde asesinado por semana. Dicho
monto equivale a una fracción del dinero entregado al régimen comunista cubano:
6,2 millones de dólares a cambio de 585 profesionales de la salud.
Es decir, los recursos
estaban disponibles, simplemente fueron reasignados. Vale resaltar que la
dictadura cubana expropia al menos el 75 % del sueldo de los médicos por los
cuales el Gobierno de López Obrador paga 10 700 dólares por cabeza. Esto no
solo viola la supuesta austeridad, sino que además termina financiando a una
tiranía.
En medio de la pandemia el
personal médico ha sido el rubro más afectado, dos de cada diez contagiados son
trabajadores de la salud. Por ello han surgido protestas a lo largo y ancho de
México exigiendo más y mejores recursos para enfrentar la COVID-19.
El «ajuste republicano» ha
afectado enormemente a la salud mexicana. Más de 10 000 empleados fueron despedidos debido al recorte del 44 %
en esta área decretado por López Obrador. Pese al supuesto ajuste, el Gobierno
gastó la misma cantidad de dinero removido del sistema sanitario en promover el
béisbol (uno de los deportes favoritos del mandatario).
De modo que una vez más el
problema no era la falta de dinero, sino su asignación, lo que a su vez expone
las prioridades del Gobierno. Cuando tuvieron la oportunidad de detener al hijo
del Chapo Guzmán, líder del Cartel de Sinaloa, el gobierno permitió liberarlo.
Los carteles de narcotráfico
son los mayores productores de violencia en México. Bajo el primer año de
gestión de López Obrador, México ha vivido el periodo más violento de su
historia, con más de 100 asesinatos por día. En el país los heridos de bala
durante tiroteos ocupan tantas camas en las salas de emergencias que mueren
pacientes vulnerables por falta de lugar.
Así que López Obrador
muestra una vez más que su prioridad no es proteger al personal médico que hoy
le hace frente a la pandemia de la COVID-19 y a los jueces que persiguen a las
organizaciones criminales, sino que opta por redestinar el dinero de los
contribuyentes para mantener a sus aliados, en este caso a la tiranía cubana.
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